La ley 9/2009, de 6 de octubre, amplía la duración del permiso de paternidad de los actuales 13 días a 28 días (4 semanas), haciéndose efectivo a partir del 1 de enero de 2011. Este derecho tan esperado se concederá a todos los padres ya lo sean por paternidad biológica, por adopción o por acogimiento, resultando de este modo más efectiva la igualdad de trato entre hombres y mujeres. Las cuatro semanas de permiso las disfrutará el padre a partir de la fecha del nacimiento, de la decisión administrativa o judicial de acogimiento o de la resolución judicial por la que se constituya la adopción.
Si el parto, la adopción o el acogimiento son múltiples, el plazo de permiso se ampliará dos días más por cada hijo a partir del segundo. El padre podrá solicitar el subsidio por paternidad, con una cuantía igual que el importe del permiso por maternidad, es decir, el 100% de la base reguladora de la prestación por incapacidad temporal debida a contingencias comunes.
Así, el padre también podrá disfrutar de sus hijos, cuidar a la madre y atender a las obligaciones familiares.
El vigente Estatuto de los Trabajadores (Real Decreto 1/1995, de 24 de marzo), contempla 16 semanas ininterrumpidas de suspensión con reserva del puesto de trabajo en caso de permiso por maternidad.
Si el padre y la madre trabajan, la madre, al iniciar su periodo de maternidad, tiene la opción de que el padre también disfrute de una parte ininterrumpida, con el máximo de diez semanas, simultánea o sucesivamente con el suyo. Esto es, que la madre puede compartir con el otro progenitor sus 16 semanas de permiso, cediéndole 10 de estas 16 semanas, reservando para ella las 6 semanas inmediatamente posteriores al parto.
La citada Ley 9/2009, de 6 de octubre, de ampliación de la duración del permiso de paternidad en los casos de nacimiento, adopción o acogida, se encuentra publicada en el BOE Nº 242 de 7 de octubre de 2009. Esta ley pretende ser una aplicación práctica de la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres, la cual estableció un conjunto de medidas para favorecer y fomentar la conciliación de la vida personal, familiar y laboral y para incentivar la distribución a partes iguales de las responsabilidades familiares entre el padre y la madre.
Todavía hace falta garantizar “una protección incrementada” contra los posibles despidos o tratos desfavorables con motivo del ejercicio del derecho al permiso de paternidad o de maternidad, por parte de algunas empresas.
NOTA ACTUALIZADA: Solo los padres de niños nacidos, adoptados o acogidos desde el 1 de enero de 2017 podrán disfrutar de las cuatro semanas en lugar de dos. Este nuevo permiso de paternidad de cuatro semanas debía entrar en vigor el 1 de enero de 2011, pero no se puso en práctica por falta de financiación.
Por: Patricia Alzate Monroy, Abogada y Doctora en Derecho
No es discriminatorio que el permiso de paternidad dure menos que el de maternidad: El Pleno del Tribunal Constitucional (STC 17 Oct. 2018. Rec. 4344/2017 ) ha sentenciado que «la atribución del permiso por maternidad, con la correlativa prestación de la seguridad social, a la mujer trabajadora, con una duración superior a la que se reconoce al padre, no es discriminatoria para el varón. La maternidad, el embarazo y el parto son realidades biológicas diferenciadas de obligatoria protección, que se refiere a la protección integral de las madres. De ahí, que las ventajas que se determinen para la mujer no pueden considerarse discriminatorias para el hombre», subraya la sentencia.
La sentencia explica que en el caso de la madre la “finalidad primordial” que persigue el legislador al establecer el descanso por maternidad y el correspondiente subsidio económico de la seguridad social es la protección de la salud de la mujer trabajadora, durante el embarazo, parto y puerperio. Se trata, pues, de una exigencia derivada del artículo 39.2 de la Constitución de preservar la salud de la mujer trabajadora durante su embarazo y después de éste y, por otra parte, de proteger las particulares relaciones entre la madre y su hijo durante el periodo de puerperio. Mientras “el establecimiento de un permiso de paternidad obedece a una finalidad tuitiva diferente: favorecer la conciliación de la vida personal, familiar y laboral, fomentando la corresponsabilidad de madres y padres en el cuidado de los hijos comunes”. Por lo que “siendo diferentes las situaciones que se traen a comparación, no puede reputarse como lesiva del derecho a la igualdad ante la ley, la diferente duración de los permisos por maternidad o paternidad y de las correspondientes prestaciones de la Seguridad Social”.
[…] de dos. El permiso de paternidad de cuatro semanas ya estaba contemplado en la Ley de Igualdad y debía entrar en vigor el 1 de enero de 2011, pero no se puso en práctica por falta de […]
Aplazada la entrada en vigor de los permisos por paternidad: El Gobierno ha decidido ayer APLAZAR 12 meses (un año) la entrada en vigor de la ampliación a un mes (cuatro semanas) de los permisos por paternidad, aduciendo «cuestiones económicas» en esta época de crisis económica. Dice que con esta medida se podrán ahorrar 200 millones de euros, pues estaba previsto que entrara en vigor a partir del 1 de enero de 2011, pero ahorá será a partir del 1 de enero de 2012.
[…] podría decir que son éstas Sentencias “pioneras” porque declaran que el interés de la madre trabajadora para cuidar a sus hijos, está por encima de las necesidades organizativas de la empresa en la que se […]
La Comisión Europea propone que ambos padres puedan beneficiarse del permiso de maternidad o paternidad del otro: La Comisión Europea ha propuesto hace ya algunos meses que cualquiera de los dos progenitores puedan beneficiarse del derecho de permiso por maternidad o paternidad correspondiente al otro durante tres meses, así como elevar de tres a cuatro meses este derecho, tanto para madres como para padres. Los Estados miembros y el Parlamento Europeo tienen que dar su aprobación.
Los trabajadores no podrán ser discriminados a la hora de reclamar este derecho y se les debe facilitar su vuelta al trabajo una vez concluido su permiso, garantizándoles su derecho a pedir una mayor flexibilidad laboral con el objetivo de facilitar la conciliación de la vida laboral y familiar.
Anteriormente ya se garantizaba a todo trabajador su derecho de permiso parental durante «al menos tres meses», pero este derecho se otorgaba sin posibilidad de transferirlo al otro progenitor, aunque en la práctica, algunos Estados permitían este derecho de transferencia.
Del total de cuatro meses de los que podría disponer cada progenitor, tres serán transferibles, es decir, podrán ser pasados del padre a la madre o viceversa, y el otro restante será obligatorio para cada padre y cada madre.
El texto de la propuesta garantiza «una protección incrementada» contra los posibles despidos o tratos desfavorables con motivo del ejercicio del derecho al permiso.